La Navaja de Ockham

 La reina de corazones siempre roja como nuestros latidos lleva ojos enamorados y aplausos en su cordura. Asombrados algunos, amantes, siempre de colores escriben su destino y relatan un libro Suena a brujería entre inviernos y primaveras Piensan a sus pies como haciendo reverencia Brilla la música, suena con fuerza en el aire nuevo amables los corazones Con todo este preámbulo inicia la llama en sus pechos alabando sus pasiones, nocturnas, en medio del campo ¡Arde pecho y ama! llénate de paz y fortuna ríete y con formalidad entre su confianza  Mi mente llena de suerte: temporadas anuales que marcan puentes  y así viaja toda nuestra fortuna.

Sin decir palabras, en obras me escucho, y tú lees un fragmento de mi mente Fuerza y detonante con energía explosiva; arte y pasión que se extiende cual orgasmo  entre amantes expresando su arte al universo Da vida o excelente experiencia de vida poder amar lo que haces desde el aliento  que te alimenta los pensamientos hasta la cruz que evoca tus creencias Serán tus pasos cubiertos  de silencio que con acto dicten tu pensamiento al mundo y su violencia en potencia ¡No calles tu realidad con necedades!

La energía de los golpes recibidos                   desde las potentes llanuras a oscuras                              que me decían ya basta                        pero no te detengas                                          solo construye                                      ...