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El nuevo aventurero

  Suele haber, una o dos veces   que una vida se despierta temprana a explorar su ambiente  más cercano a su pecho y alimento Se te quita el miedo y la duda dulce criatura  que juegas a ser vista  emocionada con lo que para mi es ínfimo  y para ti un mundo a traviesa Me sorprendes, si con tus gustos y expresiones  nunca tuve entre mis manos algo tan pequeño de infinito  potencial de amar Quiéreme, si quieres  yo gozaré de tu andar en este mundo que espero no te desencantes hasta que  puedas enamorarte de él

Relaciones entre millones

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Desde que creí que te amaba hasta que a tus brazos llegué no solo lo que me gustaba estaba en tus manos, guardián. Si quieres concebir alborada fue el deseo por tu calor y el fulgor de pasión armada dados que cayeron en flor. Entre dedos del destino y amor el deseo y nuestra color cada abrazo de tus labios, clamor me dio un salto de latidos, ardor Que me convirtieron en esclavo de tus besos, un bravo en el pecho, un suave trazo de tus labios, un suave abrazo.     

El atardecer del araguaney en su día

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Llega el alba a la colina de la nación vigorosa   llena de esperanzas de fuerza con cambios en los labios  y con fuerza en el brío. Y se enamora de sus luces  de esa luz fragrante que la dota de energía y las vitaminas pero falta también que ese árbol siga también alimentado por los animalitos del bosque y esa colina, que pertenece y es, para que no se caiga palo a bajo, porque pesa mucho y sus flores son hermosas cada año. Llega el mediodía de ese mayo, con ventarrones de lluvia, con tanta sequía, con promesas de lluvia cada día, pero le dicen a cada una de sus flores que no caigan, que ya vendrán a ser aprovechadas, y pertecer al reino vivo. Llega la tarde suave encarnecida y tibia y le dice el árbol a las nubes como en protesta ¡llueve mayo, que casi es tu final! Este es tu día Araguaney, te regalo la abundancia, para que los animalitos vengan a tu cobijo estarás lleno de tu vida y la ajena tu tierra y tus ramas darán vida a todos l...